SIRIA, ERDOGAN PONE CHAQUETA Y CORBATA A LOS YIHADISTAS, AHORA ‘ISLÁMICOS MODERADOS’… ¿QUÉ PIENSAN LAS MUJERES ESCLAVAS YAZIDÍES Y AFGANAS?

1/09/25 – ¡Tenemos suerte! ¡Estamos siendo testigos de un verdadero milagro en Siria! Los sanguinarios decapitadores y violadores en serie yihadistas de ISIS se han transformado en tolerantes “islamistas moderados”. Que Occidente, olvidándose de violaciones y atrocidades seriales , y de la terrible lección afgana, comenza a cortejar. ¡Un milagro firmado por el ‘sultán’ Erdogan!

Los nuevos señores de Siria son ex milicianoss de Isis y Al Qaeda, tele-guiados por el ‘sultan’ neo-otomano turco Erdogan. Que le hizo desfrazarse ahora con  chaqueta y corbata. Y los vende como “moderados” a Estados Unidos y Europa.  Detrás de este inteligente lavado de cara está el muy poderoso exjefe del servicio secreto turco Hakan Fidan, ahora ministro de Asuntos Exteriores. Alma maldita y posible sucesor de Erdogan. Hace ya diez años, en la primera guerra siria, el ‘sultán’ había intentado derrocar a Al Assad y hacerse con Damasco, apoyando a ISIS y otras facciones yihadistas. 

Mujeres en Kabul, 1972

Mujeres en Kabull, 2022

Sin embargo Rusia, Irán, las milicias chiítas de Irak y Líbano y los milicianos kurdos habían impedido una victoria yihadista. Y la transformación de Siria en un califato islamico vasallo de Türquia. En el segundo intento, ahora, Erdogan ha ganado. Y está intentando, por ahora, dar una imagen de respetabilidad al nuevo régimen liderado por el ex terrorista de Isis/Al Qaeda, al-Golani. Quien jura respetar a las mujeres y a las minorías. Como los talibanes en 2021, cuando reconquistaron Kabul, haciendo huir a las tropas de la OTAN, el pacto militar “más poderoso del mundo”, con el rabo entre las piernas en una retirada humillante….

En Siria, Occidente ya repitió hace diez  años el grave error cometido en Afganistán en 1989 al apoyar a sangrientas fuerzas yihadistas suníes para derrocar a un poder prorruso, autoritario, pero secular, protector de los derechos de las mujeres y las minorías. Armando y financiando a otro yihadista “moderado”, un tal Osama Bin Laden, el  futuro líder salafista de Al Qaeda. Las guerras afganas terminaron en 2021. Con la derrota de EEUU y OTAN y la victoria de los talibanes. Cuya promesa de respetar a mujeres y minorías duró sólo unas semanas. El tiempo de consolidar el control sobre el país.

Ahora las mujeres afganas, libres en los años 70 bajo el régimen prosoviético, y luego tras la derrota temporal de los talibanes, han regresado a la Edad Media. Son animales domesticos, esclavas de padres, hermanos, maridos. Todo les está prohibido: trabajar, estudiar, salir sin marido, padre, hermano, sin cubrirse con burka o niqab, hablar en público. Las azotan, las golpean, las insultan si no se cubren de pies a cabeza, si einseñan los tobillos, o salen solas sin un hombre. Es muy probable que suceda lo mismo en Siria, un pais laico, a pesar de los juramentos tácticos de al-Golani. Claro, Occidente intenta olvidar las atrocidades de Isis, las miles de mujeres yazidíes violadas y utilizadas durante años como esclavas sexuales por los milicianos de la Jihad. Muchas todavía están en sus manos. 

La zona de Idlib, que ha permanecido bajo el control de los yihadistas de al-Golani en los últimos años,  infunde miedo. Las mujeres tienen el mismo estatus que las afganas… El incidente ocurrido durante la visita a Damasco de los ministros de Asuntos Exteriores de Francia y Alemania sugiere lo peor. Al-Golani se apresuró a estrechar la mano del francés Jean Noël Barrot, un hombre. Mientras que se negó a tocar la de la alemana Analena Baerbock…. una mujer. Sería interesante escuchar lo que piensan los miles de mujeres yazidíes violadas sobre el “milagro de Damasco”, producido por la varita mágica del sultán Erdogan. O sus hermanas ahora encerradas en la gran prisión al aire libre que llaman Emirato Islámico de Afganistán. 

iSE ANCHE ISRAELE AIUTA AL QAIDA IN SIRIA. L’ “APRES MOI LE DELUGE” DI JOE BIDEN 

6/12/24 – L’anziano presidente americano Joe Biden sembra determinato a incendiare il pianeta prima di andarsene e di cedere il 20 gennaio  la poltrona a Donald Trump. In una sorta di “Après moi le déluge” (“Dopo di me il diluvio), secondo la formula del re di Francia Luigi XV, Biden ha tentato di drammatizzare ulteriormente la guerra in Ucraina, autorizzando Kiev a usare i micidiali missili ATACM contro il territorio russo.  Una mossa che poteva provocare una risposta nucleare di Mosca, aveva avvertito il Cremlino. Il presidente Putin fortuntamente  però ha reagito per ora con moderazione. Aspettando l’arrivo di Trump, che ha promesso la pace in 24 ore.

Ora Biden tenta un affondo anche in Medio Oriente, giocando di nuovo la carta dell’appoggio ad una emanazione di Al Qaida in Siria. Come 10 anni fa Obama, sempre in Siria con l’Isis. E prima ancora con l’appoggio Usa a Bin Laden in Afghanistan, per rovesciare un  governo laico e protettore dei diritti delle donne vicino a Mosca. Sappiamo come è andata a finire a Kabul…

Gli aerei americani negli ultimi giorni hanno bombardato le colonne di miliziani sciiti iracheni, che accorrono in aiuto del presidente sciita alevita siriano Bashar el Assad, minacciato dall’avanzata dei jihadisti di Jahbat al-Nusra, nati da Al Qaida. Una mossa azzardata che punta a indebolire la Russia su un altro fronte, distraendo forze dal fronte ucraino. La Russia è alleata di Damasco con l’Iran e le forze sciite del Libano e dell’Iraq. L’offensiva fulminea dei jihadisti, teleguidati dalla Turchia sunnita del ‘sultano’ Erdogan, dopo aver preso Aleppo, seconda città e polmone economico della Siria, sono ora a 100 chilometri da Damasco.

Una loro vittoria significherebbe la creazione di un califfato islamico sunnita in Siria, fondato sulla sharia. E la fine della tutela delle minoranze religiose, fnora protette da Assad.  Nessuno ha dimenticato gli orrori perpetrati dall’Isis 10 anni fa. I massacri, le esecuzioni sommarie, le torture, lo stupro sistematico di migliaia di donne e bambine della minoranza yazidi, vendute come animali e trasformate in schiave sessuali. Centinaia di loro sono ancora nelle mani dei loro aguzzini jihadisti, da cui hanno avuto dei figli. In una drammatica complicazione del loro calvario,. Ignorato praticamente dal resto del mondo.

A fianco dei jihadisti siriani si schiera ora anche Israele. L’aviazione dello stato ebraico, riferisce Times of Israel, ha attaccato depositi di munizioni dell’esercito siriano e concentrazioni di forze di Assad. Negli ultimi mesi Israele ha già distrutto varie postazioni dell’esercito siriano e dei suoi alleati. iraniani e libanesi, favorendo l’offensiva dei jihadisti. Già dieci anni fa nella prima fase della guerra in Siria Israele aveva aiutato le forze jihadiste, con l’ossessione di rovesciare Assad, formalmente ancora in guerra con lo stato ebraico. E di colpire cosi l’arci-nemico iraniano, suo stretto alleato.  Un altro paradosso dei complicati e a volte oscuri rapporti di forze del Medio Oriente. Israele infatti aiuta cosi i jihadisti salafiti sunniti di Jahbat al-Nusra, vicini ad Hamas che lo stato ebraico combatte e ha quasi distrutto a Gaza. Con la probabile conseguenza, se Russia e Iran non riusciranno a bloccare l’offensiva dei jihadisti, di avere sul fianco nord non più un governo autoritario ma razionale e di ispirazione socialista, ma uno stato islamico intollerante e  fondamentalista. Che probabilmente si dichiarerà come Hamas per la distruzione di Israele….

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